Hoy hablemos un poquito sobre la resistencia. La resistencia tiene varias connotaciones. Así como resistir puede ser una cualidad frente a las adversidades, la resistencia también está asociada con la rigidez y la reticencia a los cambios. En este sentido, la resistencia es una actitud tóxica y veamos por qué.
La resistencia te lleva a vivir una vida más cerrada, te hace sentir amargado, dejas de ver el lado positivo porque no logras ver más allá de lo que la vida te está entregando. Cierra las posibilidades de avanzar en tu proyecto de vida o en cualquier objetivo que te propongas. Te consume física, mental y emocionalmente. Tu relación con los demás se vuelve tensa, porque tiendes a exigir o condenar. ¿Cómo saber que estás viviendo un estado de resistencia?
1. Has perdido la capacidad de sentir emoción o alegría.
2. Sientes muchas emociones y pensamientos negativos.
3. No aceptas una situación o persona o algo tal y como es.
4. Juzgas todo el tiempo, en vez de permanecer en una posición neutral.
5. Vives en estado de rigidez.
Darte cuenta de que estás viviendo en un estado de resistencia es el primer paso para transformarte. Acepta cómo estás viviendo y las consecuencias que eso te está trayendo, y empieza a tomar decisiones conscientes sobre cómo quieres realmente vivir, cómo quieres que sea tu relación contigo mismo y tu entorno, y encuentra ese estado en el que fluyes para que devuelvas a tu vida la alegría, flexibilidad y energía que necesitas. 🎋
¿Qué cambios harías hoy en tu vida para soltar la resistencia? Te leo!
Feliz día🍃💓
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